Si por algo se distingue el territorio de la Mancomunidad Reserva del Saja es por la amplia oferta gastronómica que ofrece al visitante dispuesto a gozar de los placeres de la mesa montañesa.

La merecida fama de la cocina local se fundamenta esencialmente en el cocido montañes.  El puchero es un plato sencillo, de caracter popular y humilde. Contiene diferentes partes del cerdo, patata cocida menuda, alubia pequeña, blanca, y berza muy tierna. El resultado es un caldo muy sustancioso, relativamente espeso, que suele acompañarse de un vino tinto de la Ribera del Duero o de Rioja. En Ucieda (Ruente) se celebra todos los años la fiesta del “Cocido Montañés”, declarada “Fiesta de Interés Turístico Regional”, congregando a miles de personas en los últimos días del verano para degustar este plato montañés.

Otras especialidades de la gastronomía local son los guisos basados en las carnes de caza, particularmente en la de venado y jabalí; y la carne de vacuno de pastos naturales, donde destaca la de vaca tudanca, raza autóctona de Cantabria muy apreciada por su carne.

Entre los postres destacan los quesos de vaca y oveja, y las afamadas picayas chamarugas, dulces de hojaldre con azúcar y almedras.

A lo largo del todo el valle podemos encontrar una amplia oferta de RESTAURANTES donde degustar los platos tradicionales de la cocina montañesa.